Corral de Saus. Moixent. 1979

13-07-197930-07-1979Santiago Broncano Rodríguez
Joan Bernabeu Aubán
La zona elegida fue el existente entre las excavadas durante los años anteriores, para unificar todo el conjunto. La primera zona fue donde se encontró un jefe femenino en piedra, mientras que en la segunda se encontraron las grandes tumbas. Corresponde la zona excavada ahora a las cuadrículas J011 a J020 e I011 a I029, levantándose la capa removida por la maquinaría agrícola. Unitariamente y al llegar al terreno no removido, se separaron los materiales de las cuadrículas J011/12 e I011/12 de los del resto, para corresponder esta segunda superficie al espacio donde aparecen tumbas de agujero, las cuales por la superficialidad han sido destrozadas en las partes más altas.
A los sectores inmediatos en las zonas contiguas quedaron a cuerpo descubierto dos empedrados que parecen estar en relación con ellos a través de la zona excavada y que es posible que correspondan al basamento de la cubierta tumular de una gran tumba cuadrangular muy destrozada. En K011, en la parte mediana con J011, es donde apareció el mencionado busto femenino, utilizado como simple piedra del empedrado.
La capa superficial, de tierras color marrón oscuro, se corresponde con las tierras removidas y desfondadas por la maquinaría agrícola, y así carencia de cualquier estratigrafía con estructuras, pero los materiales que se recogen son abundosos, como fragmentos de jarras ibéricas sin decoración o con decoración floral y geométrica pintada, fragmentos de cerámica de barniz negro y unos pocos de tierra sigillata y de época moderna, fusaoiolas, pinzas de depilación de bronce, trozos de útiles de bronce, hierro, plomo, y pasta de vidrio y huesos humanos calcinados.
Una vez extraídas estas tierras removidas, se procedió a levantar una segunda capa de tierra marrón-amarillentas a J011 y J012 y negruzca al resto. En aquellas se recogieron fragmentos cerámicas ennegrecidos y gran cantidad de cenizas adheridas, por lo cual tendrían que corresponder a los desechos de una incineración existente a las cuadrículas contiguas, todavía no excavadas y destrozadas; en relación con ellas se recogieron numerosos fragmentos de huesos humanos calcinados.
El resto de las cuadrículas fueron similares a las mencionadas. destacando en I014/15 el extraordinaria abundancia de fragmentos cerámicas ibéricos, los cuales formaban un manto en tierras negruzcas sobre otras de claras.

(La tarea del Servicio de Investigación Prehistórica y de su Museo el pasado año 1979, pp. 106-107).
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